Una mujer de Texas compró en una tienda de segunda un busto romano para que formara parte de la decoración de su casa, sin embargo, esta pieza comprada en 35 dólares resultó ser un monumento histórico.
El busto romano tallado en mármol, fue comprado por la coleccionista de arte Laura Young, quien la encontró en Goodwill en 2018, y perteneció a la colección del rey Luis I. Los historiadores creen que puede representar a un hijo de Pompeyo el Grande, quien fue derrotado por Julio César
Según expertos, después de revisar la pieza, se determinó que esta escultura estaba desaparecida desde la Segunda Guerra Mundial, fue vista por última vez en Aschaffenburg, Alemania y habría sido robada por un soldado, quien la llevó a Estados Unidos.
“Estamos muy contentos de que una parte de la historia bávara que creíamos perdida haya reaparecido y pronto podrá volver a su ubicación legítima”, dijo Bernd Schreiber, presidente de la Administración de Palacios, Jardines y Lagos Estatales de Baviera.
Después de enterarse de la historia detrás de su busto romano, Laura Young, decidió llegar a un acuerdo con el museo alemán para regresarlo a su país de origen.
“Pero fue agridulce porque sabía que no podía quedarme ni vender el busto”, dijo. “De cualquier manera, me alegro de haber sido una pequeña parte de su larga y complicada historia, y se veía genial en la casa mientras lo tuve”. declaró la mujer