Tras ser reanimado, el convicto Benjamin Schreiber menciona haber «cumplido» con su condena.
En esta clase de noticias que nos gusta reportar, Benjamin Schreiber de 66 años, tuvo que ser sometido a una reanimación cadiopulonar cinco veces en 2015. El se encuentra cumpliendo una cadena de cadena perpetua por asesinato y había dejado por escrito su deseo de no ser resucitado, por lo que no estuvo feliz de que le salvaran la vida.
En 2018, Schreiber acudió a los tribunales argumentando que fue revivido sin su consentimiento y que al momento de «morir momentáneamente» había cumplido con su condena. Esta reclamación fue desestimada este jueves (7 de Nov) por ser considerada como «poco convincente y sin mérito”.
«Schreiber todavía está vivo, en cuyo caso debe permanecer en prisión, o en realidad está muerto, en cuyo caso esta apelación es discutible», escribió la jueza Amanda Potterfield.
Reportado por The New York Times, el convicto cumple una cadena de perpetua sin libertad condicional tras ser declarado culpable de asesinato por golpear con el mango de un hacha hasta causarle la muerte a John Dale Terry en 1996.
El convicto fue trasladado a un hospital en 2015 tras ser encontrado inconciente, donde descubrieron que unos cálculos renales le causaron intoxicación séptica, según los registros judiciales.
Su hermano fue contactado y mencionó que «si tiene dolor, pueden darle algo para aliviarlo, pero de lo contrario, deben dejarlo morir».
De igual manera los doctores le operaron y repararon sus órganos dañados, salvando su vida, a pesar de sus instrucciones, por lo que Schreiber argumentó que su encarcelamiento es algo ilegal, pues le condenaron a una cadena que terminó cuando este murió momentáneamente.
El tribunal desestimó el caso en cuanto a lo de su fallecimiento, pero no han abordado el tema de la reanimación.
