Agradecemos a Ubisoft la copia para reseña de Prince of Persia: The Lost Crown en PS5.
Han pasado muchas cosas desde que Jordan Mechner lanzó el Prince of Persia original en 1989, pues gracias a sus novedosas técnicas de animación, la industria del videojuego dio un salto gigante que todavía tiene repercusiones en la captura de movimientos.
Con el tiempo, Prince of Persia se convirtió no sólo en un fenómeno, sino en una leyenda de la industria, alcanzando una secuela en 1993, una tercera parte de la cual nunca hay que hablar, y después de eso, desapareció del interés público por una década.
Fue en 2003 que, gracias a Ubisoft, la franquicia tomó un nuevo rumbo con Prince of Persia: The Sands of Time, juego que inauguraría una nueva trilogía de éxitos que volvieron a cambiar a la industria del videojuego, pues no sólo sus mecánicas de control del tiempo, fluidez en el movimiento, y parkour siguen imitando, también fue la cuna de otra franquicia que cambiaría la historia del videojuego, Assassins’s Creed.
Lamentablemente la historia se volvería a repetir, pues tras el estreno de la última entrega de la trilogía, The Two Thrones, en 2005, el Príncipe volvería a su letargo, solo teniendo breves apariciones en remasters o spin-offs… y un reboot que muchos ya han olvidado.
Es por eso que, cuando Prince of Persia: The Lost Crown fue anunciado el año pasado, muchos de nosotros nos sentimos intrigados y emocionados, pero a la vez, algo escépticos, pues el amor que tenemos por la Trilogía del Tiempo es tan intenso, y las últimas entregas tan olvidables, que teníamos miedo que fuera otro granito en el olvido del Príncipe.
Pero déjenos decirles que apenas pusimos el juego en nuestro PlayStation 5, todas nuestras dudas se despejaron, el cielo se iluminó, y por unos instantes olvidamos el mundo y nos fuimos directo a Persia para enfrentarnos a incontables enemigos y retos.
Pero vamos paso a paso en este análisis.
El regreso de Prince of Persia.
Desarrollado por Ubisoft Montpellier, Prince of Persia: The Lost Crown nos transporta a la antigua Persia, donde conocemos a Sargon, el miembro más joven de Los Inmortales, un grupo de siete legendarios guerreros que defenderán la corona a toda costa.
Es por eso que, cuando el Príncipe de Persia (aplausos), Ghassan, es secuestrado por una vieja aliada, deberán viajar rápidamente al Monte Qaf, un lugar misterioso donde existe una terrible maldición, pues aunque una vez fue una prospera tierra llena de conocimiento libre y paz, ahora es un lugar en ruinas, donde el tiempo y el espacio pasan de forma diferente.
Esto lo podrás ver rápidamente, pues mientras para ti han pasado algunas horas o minutos, tus aliados o demás personas atrapadas ahí, han estado viviendo semanas, meses o décadas en ese periodo de tiempo. Y todos se han visto afectados por susurros, alucinaciones y locura.
Rápidamente, nos damos cuenta que Ubisoft mantiene la magia y el misticismo de la franquicia, y han decidido combinar lo viejo con lo nuevo, pues este es un MetroidVania que toma elementos de las distintas eras del Príncipe.
Vamos por lo más básico, el gameplay se enfoca a la exploración de áreas con elementos tradicionales como el parkour, acrobacias, saltos precisos, trampas mortales, y un mapa que parece más un laberinto, pues deberás buscar en cada rincón y regresar en más de una ocasión una vez que adquieras nuevas habilidades.
A lo largo de tu aventura, no sólo encontrarás enemigos, también te toparás con habitantes que te darán ventajas, como abrir parte del mapa, amuletos con mejoras, mayor barra de vida, o bien, una herrera del inframundo que le dará mayor poder a tus armas. Eso sí, todo tiene un costo, por lo que vas a tener que juntar la mayor cantidad de fragmentos del tiempo o hierro para adquirirlas.
Dentro de todo, existe un balance perfecto entre el combate, la exploración, y el looting, por lo que aunque mueras, Y LO VAS A HACER SEGUIDO, lo tomarás con algo de coraje, pero también como un reto poder llegar más lejos que la última vez.
Y es aquí la mayor ventaja del juego, pues The Lost Crown es tremendamente adictivo y divertido, nos pasamos unas 5 o 6 horas jugando el primer día sin darnos cuenta que ya era muy entrada la noche, y al otro día solo queríamos despertar para seguir explorando. Esto es algo que le da mucho valor al juego, y nos permite retomarlo una y otra, y otra vez, sobre todo cuando el juego le sube al 100% al reto y nos enfrenta a puzzles o trampas que requieren de todas nuestras habilidades.
Afortunadamente, el juego cuenta con la selección de dificultad para aquellos que prefieren la historia al reto, además de que, si eres como nosotros que nos perdemos en todos los MetroidVanias, cuenta con una asistencia que te indica, más o menos, qué camino deberías tomar, pero claro, eres libre de elegirlas, o seguir sus sugerencias.
Y hablando de retos, el combate es muy variado y frenético, alternando principalmente entre ataque, defensa y esquivar. Todo esto se combina como una especie de árbol de opciones, pues por ejemplo, puedes defenderte y crear un parry, lo cual te permite atacar, o bien, usar una de tus habilidades o armas secundarias, inclusive podrías esquivar, lanzarte por los aires y atacar con un combo que eleve al enemigo por los aires, mientras lo rematas y comienzas otro combo con otro enemigo.
Las posibilidades son ilimitadas, y dependerán mayormente de tu estilo de juego. Afortunadamente existe una sección que te permitirá explorar los diferentes estilos de combo y habilidades, por lo que te sugerimos probar todas, mínimo por las recompensas económicas que te dejarán probarlas 1 vez.
Gráficamente Prince of Persia: The Lost Crown tiene un estilo de arte tremendo, sobre todo en las cinemáticas y en los escenarios que te transportarán a una tierra misteriosa, esto de lejos, pues cuando hacen un acercamiento si se puede ver un estilo algo anticuado que tal vez a algunos no les guste.
Ahora, ¿es un juego perfecto? Lamentablemente no, pues aunque su acción y emoción te mantendrán pegado a tu consola, si le sufrimos en una sección, particularmente con un enemigo que no hacía más que regresarnos una y otra vez al mismo lugar. Esto no rompe nada, pero la verdad todos los que pudimos jugarlo para la reseña, sufrimos el mismo tipo de mareo y dolor de cabeza en ESA sección.
Fuera de eso, todo es miel sobre hojuelas, la inmensidad del mapa se combina con un combate adictivo y personajes llenos de carisma, y, si eres de aquellos que les encanta explorar hasta el último pixel del mapa, vas a encontrar muchas recompensas y sorpresas escondidas.
Conclusión:
Prince of Persia: The Lost Crown es una experiencia tremenda, con un precio accesible y una rejugabilidad brutal. Te llevará un aproximado de 25 a 30 horas terminarlo, pero completarlo al 100% si te tomará mucho más.
Te sugerimos mucho también completar las misiones secundarias, pues estas te darán mucho contexto de la historia principal, que ya de por si es algo confusa con esto de los cambios temporales.
Por otra parte, tal vez le tenemos mucho amor al Príncipe del 2000, pero Sargon se siente como un personaje fresco y necesario para darle nueva vida a la franquicia. Su estilo de combate es intuitivo, y su historia nos deja muchas ganas de seguir conociendo más sobre su futuro, por lo que esperamos que Ubisoft no nos haga esperar 10 años más para una nueva aventura en Persia.
Si eres fan de Prince of Persia, The Lost Crown es una compra obligada que vas a disfrutar a más no poder, sea en donde sea que la llegues a jugar (aunque sentimos que en Nintendo Switch te podría dar más facilidades de jugarlo en otros lados), pero si nunca le has entrado a la franquicia, esta es la oportunidad perfecta para hacerlo, no te vas a arrepentir de este tremendo viaje.
