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S11 Gaming Argentina y Malvinas Gaming (Perú), disputarán el M4 World Championship de Mobile Legends: Bang Bang

Tras una gran temporada, Malvinas Gaming consiguió clasificarse por segundo año consecutivo al Campeonato Mundial de Mobile Legends, teniendo así una oportunidad más para medirse ante los mejores equipos del mundo.

A pocos días de que inicie el Campeonato Mundial de Mobile Legends: Bang Bang (M4 World Championship), los dos representantes hispanoamericanos Malvinas Gaming (Perú) y S11 Gaming Argentina revelaron cómo se están preparando para afrontar el torneo más importante del año, en el que deberán medirse ante las mejores escuadras de todo el mundo, como MDH Esports (región del Mekong), ONIC Esports (campeón de Indonesia), TODAK (Malasia), RRQ Akira (campeón MLP BR S3, Brasil), Team HAQ (Malasia) y The Valley (Norteamérica)

S11 Gaming Argentina se prepara para debutar en su primer Campeonato Mundial de Mobile Legends: Bang Bang. Desde el equipo aseguran que están entrenando en la unidad del plantel y estudiando a los históricos rivales que les tocará enfrentar en el Campeonato Mundial. “Estamos trabajando duro para demostrar un buen nivel y tener protagonismo en el M4”, declaró Sharbel Pérez, manager & partner de S11 Gaming Argentina.

World Championship de Mobile Legends: Bang Ban 1

Para lograr sus metas, S11 Gaming Argentina está trabajando duro en la preparación mental y entrenamiento físico de sus jugadores, sosteniendo la importancia de prácticas complementarias al juego técnico. “Desde la organización queremos cultivar la importancia de la preparación mental en nuestros jugadores, dado que influye directamente en su performance como protagonistas”. Está claro que la escuadra argentina tiene altas expectativas en el campeonato que se les avecina, teniendo como objetivo dar lo mejor de sí mismos y siempre buscar la victoria: “estamos enfocados en llegar lo más lejos que podamos”, confirmó Sharbel Pérez.

Por último, no caben dudas de que para Malvinas Gaming volver a competir en el M4 es una prueba de fuego, y la ilusión mundialista sigue intacta: el objetivo es ganar el campeonato mundial.