Por increíble que parezca, ha sido revelada una estatua gigante de Cheeto en la zona rural de Alberta, provincia conocida por sus atracciones de carretera.
De acuerdo con National Post Canadá, la estatua de cinco metros de altura se instaló en un campo vacío en las afueras de Cheadle, Alta, una pequeña aldea de 80 habitantes al este de Calgary.
La estatua, apodada Cheetle Hand Statue, se construyó como promoción para celebrar el icónico polvo naranja, llamado «Cheetle«, que queda en las manos de una persona después de comer el bocadillo.
Cheetle, un monumento al Cheeto
La escultura fue financiada en su totalidad por PepsiCo, propietaria de la marca Cheetos, que dijo en un comunicado de prensa que la estatua poco convencional resume la «diversión» del producto.
La elección de Cheadle se debe a que su nombre es un homónimo de «cheetle», la palabra registrada que hace referencia al residuo naranja que se acumula en los dedos durante el consumo de Cheetos.
Cheadle no tiene alcalde, pero PepsiCo consiguió el apoyo del presidente del club comunitario local, James Gosteli.
«¿En qué otro lugar podría la marca Cheetos honrar al icónico Cheetle, si no es aquí?», dijo en un comunicado.
La estatua de Cheadle es una audaz maniobra de marketing para la empresa estadounidense, y son indiscutiblemente el snack de queso a base de maíz más vendido en Estados Unidos.
Y por sorpresa de todos, la estatua formará parte temporalmente del paisaje de Alberta, los canadienses tienen hasta el 4 de noviembre para visitar la estatua de Cheetle Hand.
¿Que opinan de la estrategia de PepsiCo y Cheetos con esta poco convencional escultura?
