WWE honra a su más grande leyenda, The Undertaker, en la ceremonia del salón de la fama.

El salón de la fama ha sido muy controversial, con decisiones que han impresionado al universo de WWE por las decisiones que uno como público no termina de comprender. Sin embargo, la noche del 1 de abril de 2022, fuimos testigos desde la WWE Network de uno de los discursos más emotivos de la historia de este salón de la fama, en donde se honró a la leyenda más importante en la existencia de la empresa Mcmahon.

Anoche, conocimos por primera vez a Mark Callaway, quien encarnó el personaje de The Undertaker por más de dos décadas en donde se convirtió en un icono irrepetible, un ídolo que inspiró a chicos y grandes, y que llenó de terror las eras más importantes de la empresa. Taker, nos dio luchas históricas, feudos que mantuvieron a los seguidores pendientes de su televisión semana a semana hasta ver la culminación de estos en los eventos de fin de semana.

El universo de WWE da las gracias a Taker

En un discurso emotivo, agradeció al universo de la WWE por darle vida a The Undertaker, posteriormente honró a sus padres con varias lecciones de vida que le dieron, además confesando que sus padres nunca estuvieron de acuerdo que empezara a entrenar para ser luchador, pero posteriormente lo apoyaron hasta el último día.

Recordó a sus amigos The Godfather, Yokozuna, Brian Adams y Paul Bearer por estar a su lado por casi más de 30 años. Además honró el legado de Bruno Sammartino, Ricky Steamboat, Dusty Rhodes, Ric Flair y Andre The Giant. De ahí dedicó palabras a Stephanie McMahon diciéndole que la ama como si fuese su hermana, a la familia McMahon por su apoyo y hospitalidad, habló también de Kane y lo honró como un talentoso compañero y un hermano que siempre quiso.

Cerró dedicando palabras a sus hijos (Kaia, Gunner, Chasey, Gracie y su pequeño hijo de dos años del cual no hay mucha información) quienes lo hacen cada vez más un mejor padre y a Michelle McCool por enseñarle a amar así como aceptarlo tal y como es. Por último, a su jefe y su padre en el negocio Vince McMahon a quien le agradeció por confiar en él y crear al Undertaker. Finalmente cerró con su mítico»Rest in Peace», tuvo un aplauso de más de 5 minutos cuando recién entró y finalmente se puso su característico traje y cerró la velada diciendo «Nunca digas nunca» para caminar por la rampa y alzar su puño.