En una de nuestras secciones favoritas de este mundo enfermo y triste, les vamos a platicar una historia de amor bastante peculiar, digna de cualquier triangulo amoroso Hollywoodense, esta vez sucedió en Rusia. ¿Los involucrados? Una influencer, su marido, su hijastro y un bebé.
Marina Balmasheva de 35 años, se ha casado con su hijastro Vladimir, de 20 años, después de divorciarse de su padre Alexey Shavyrin, y ha anunciado que esperan su primer bebé. En mayo, Balmasheva recibió múltiples reacciones en Instagram, después de compartir una foto con su hijastro/esposo hace 13 años, es decir, cuando Vladimir solo tenía 7 y una foto actual, donde están juntos como pareja.
En lugar de persuadir a la gente para que la apoyara, la influencer atrajo una tormenta de comentarios contra ella cuando compartió la foto del antes y el después a sus más de 420,000 seguidores. Marina, que proviene de la región occidental rusa de Krasnodar Krai, vivió con su ex-marido Alexey, de 45 años, desde 2007 durante más de 10 años antes de divorciarse.
Influencers: Cuando lo ‘viejo’ ya no es tendencia
Marina compartió esta semana un video de su matrimonio con Vladimir en una oficina de registro local, en el que reveló que están esperando un niño juntos. Así mismo también compartió una foto del día de su boda, escribiendo:
«Condujimos hasta la oficina de registro, ni siquiera tenía un cepillo de pelo conmigo. Los anillos estaban en el coche. Había buen humor y un poco de vergüenza. Después de la oficina de registro, nos vestimos con el típico traje de novia y disfrutamos de una agradable recepción en un restaurante local con varios invitados. Estamos esperando un bebé y ahora queremos mudarnos a una ciudad más grande.»
«Nunca sabes cómo resultará la vida y cuándo conocerás a una persona que te haga sonreír. Sé que algunos nos juzgarán, otros nos apoyarán, pero somos felices y deseamos que tú también lo seas», comentó la influencer.
¿Qué planes tienen la influencer y su marido?
De acuerdo con Dailymail UK, Marina añadió que está muy enamorada de Vladimir, y que la pareja está ayudando a criar a tres de los cinco hermanos. Se dice que adoptó a los cinco hijos de su ex-marido cuando estaban juntos, pero el más joven, que tiene síndrome de Down, sigue viviendo con el padre.
Mucha gente quedó indignada tras el anuncio y dijeron que era inmoral empezar una relación con el niño que ella había ayudado a criar. Otras personas hicieron comentarios groseros sobre su abandono de un hombre mayor por uno más joven.
¿Qué opinión tienen al respecto? ¿Consideran correcta la decisión de Vladimir y Marina?