Agradecemos a Neonic Game Studios la copia para reseña de Moorhuhn VR Blast.
¡Prepárate para disparar a unos pollos como nunca antes con «Moorhuhn VR Blast»! Siente la vibra arcade mientras entras en el mundo de Moorhuhn en Realidad Virtual. Pon a prueba tus habilidades de tiro en una variedad de niveles clásicos que conoces y amas.
Desde que la creación de los videojuegos, hay ciertos arquetipos de gameplay que se han repetido de una u otra forma, figuras que se conectan, pelotitas con palitos, y por alguna razón, disparos con pollos o aves. Desde Duck Hunt, hasta ese tipo de juegos que veías salir para el Nintendo Wii y aparecían en tiendas a 1 dólar o menos.
Y por alguna razón, Moorh… Murh… Moorhuhn es una de esas franquicias que estamos seguros ya hemos visto en varias ocasiones y consolas, y al parecer fue cierto, porque al momento de hacer esta reseña nos dimos cuenta de que tienen muchas entradas en su historia.
Si fue grande, exitosa o recordada, no tenemos idea, pero si nos recordó a ese juego viejito de South Park para el Nintendo 64, y pareciera ser el mismo, pero ahora con una función de Realidad Virtual.
En realidad, no hay mucho que decir de este juego, sólo usas tus armas para matar pollos y hacer puntos, desbloquear armas y trajes para los pollos, y básicamente ya, ni siquiera son trajes interesantes, la verdad. De hecho, ni siquiera desbloqueas armas, sólo escenarios con armas específicas.
¿Entonces al menos es divertido dispararles a los pollos? Pues, casi, eso cuando los controles de disparo responden o se mantienen estables. Además de que, por alguna razón, es tremendamente complicado dispararles a unos huevos que te lanzan y manchan la pantalla.
Los mapas, o más bien, escenarios, van del viejo oeste, una costa, y cosas simples así, no hay mucho que decir, no hay nada que explorar.
Conclusión de Moorhuhn VR Blast
Moorhuhn VR Blast pudo haber funcionado… En un arcade medio muerto de una cantina olvidada por ahí de principios del 2000.
No tiene buenos controles, buen diseño o nada creativo que le haga tener una imagen propia en el mundo del gaming, salvo «uh, pollos, que divertido»… Pero eso es algo que ya se ha visto incontables veces.
Si tienes 4 años, no te mareas usando VR, nunca has jugado un videojuego, no tienes estándares de calidad, y te sobran los 12 dólares que cuesta, te recomendamos mejor irte a comprar un pollito asado y veas pintura secarse en la pared, te lo vas a pesar mejor.
