Agradecemos a Chorus Worldwide por una copia para reseña de Coffee Talk Episode 2: Hibiscus and Butterfly.
El género de simulación de baristas no es precisamente uno que tenga muchas entregas en la historia, y mucho menos unos que podamos destacar entre los jugadores, pero si han existido uno que otro que se logra colar entre la crítica y ganando seguidores, como VA-11 HALL-A o Coffee Talk, quien acaba de lanzar su segunda parte.
Llamarlo segunda parte es más justo para el juego que decirle que es una secuela, pues no hay grandes cambios gráficos o en mecánicas de juego para decir que es algo completamente nuevo.
Aquí sigues siendo un barista que como cliché de toda película o serie, siempre estará en la barra escuchando las aventuras e infortunios de aquellos que pasan por su cafetería. Con la peculiaridad de que aquí estamos en una Tierra alterna donde monstruos mitológicos y humanos conviven.
El juego toma lugar en 2023, tres años después de los eventos del primer Coffee Talk y las cosas han cambiado, y a la vez, se mantienen en el mismo lugar. Las tensiones raciales entre los humanos y “monstruos” han casi acabado, aunque existen tensiones por cosas como la economía, el día a día con Inteligencias Artificiales, diferencias sociales, etc. Pero como en el primer juego, nada de esto tiene que ver con tu historia, pues solo te enteras de estos cambios políticos por periódicos entre cada capítulo, el enfoque del juego es hacía los personajes que vas a conocer, y a aquellos que regresan a tu cafetería.
Todas estas historias se desarrollarán en varias narrativas que involucran a personajes como Amanda, la misteriosa hermana del aún más misterioso ser en traje de astronauta, Silver, una banshee frustrada llamada Riona, o un sátiro influencer en búsqueda de nuevos rumbos llamado Lucas. Pero también regresan personajes como el oficial Jorji, las desarrolladoras Myrtle y Aqua, aunque lamentablemente tu amiga del primer juego, Freya, se encuentra lejos por un viaje.
En medio de todo esto vas a tener que cumplir con las ordenes de tus clientes, las cuales van desde órdenes directas como “quiero un café sin nada de leche”, y otras que, como buenos hipsters, son más sugerencias que nada, como “algo nuevo, algo refrescante y dulce o algo que me animé y me recuerde a mi juventud donde no tenía dinero”.
Y si quieres ir practicando para poder cumplir con todas las órdenes, existe el Modo Eterno, el cual hace a un lado la historia y se enfoca a atender y desbloquear todas las recetas que hayas fallado en encontrar en la historia. Otro punto tremendamente a favor es que (por fin) Coffe Talk está al español, si, lamentablemente es solo español de España, y muchos chistes se pierden al traducirlo con su peculiar forma de traducir, como el doble sentido del Peas Tea (Té de pipi), pero bueno, al menos esto va a permitir que muchos nuevos jugadores puedan conocer este juego, así que, un alma por otra alma.
Otro punto es que regresa el uso de tu celular para controlar cosas como la música de fondo (que nos gustó un poquito más el primer soundtrack), ver las historias del “no Instagram” del juego, ver las recetas de tu cafetería, y, conforme entregues bien las ordenes o avances más en la historia, desbloquear más pedazos de sus redes sociales y conocer mejor sus vidas fuera de tu cafetería.
Por cierto, como en el primer juego, tu café es en cierta forma el motor de esta narrativa, entregar mal las órdenes significará ver un final mediocre de estos personajes, pero si logras satisfacer, emocionar o impulsar a estos personajes con tus pláticas y bebidas, obtendrás el verdadero final de todo esto. Esto es algo interesante, pues el vínculo que se forma con cada buena orden te resonará en múltiples aspectos de la vida real, y te vas a sentir identificado en más de un aspecto.
También se añade la opción de encontrar objetos perdidos u olvidados en la barra, y deberás pensar bien en a quién entregarlos, pues estos pasan de lo obvio a lo creativo, y si no los entregas en su momento, entonces ya no podrás entregarlos más adelante.
¿Es necesario haber jugado el primer juego para poder disfrutar su segunda parte? Sí y no. En teoría el juego te da las suficientes herramientas para conocer a tus personajes, pero por otro lado si jugaste el primer juego vas a sentir como si vieras a un viejo amigo para tomarte un café con este, ver qué tanto ha cambiado su vida, sus nuevos sueños, etc.
Conclusión de Coffee Talk Episode 2.
Coffee Talk 2, como su primera entrega, no son tanto un juego, sino una experiencia guiadas por una narrativa y sus personajes. Este tipo de aventuras gráficas no son para todo mundo, menos para aquellos que están acostumbrados a juegos llenos de explosiones y héroes que salvan al universo después de un sacrificio con heavy metal de fondo.
No, Coffee Talk 2 no es juego épico y enorme, es una experiencia personal donde su simplicidad es lo que le hace mágico. Y aunque no cambia mucho de lo visto en el primer juego, este construye sobre estas bases para ofrecer una historia más refinada, mientras añade elementos que te harán revivir la historia en más de una ocasión para ver cada rincón de este juego.
La forma en que Chorus Worldwide logra proyectar muchas emociones con estos personajes es algo que aplaudimos tremendamente, dándonos la oportunidad de reflexionar sobre cosas que vivimos diariamente, como las relaciones online, vivir una discriminación, bloqueos creativos o laborales, el sentido de nuestras vidas y lo que hacemos diario, el miedo al compromiso, entre otros.
Si quieres disfrutar de un momento de paz, prepárate un cafecito, acomódate en tu sillón más cómodo y relájate mientras te adentras a la mágica experiencia de Coffee Talk Episode 2: Hibiscus & Butterfly.
Sigue leyendo:
