Al parecer escuelas de Japón han decidido prohibir el uso de las coletas para “proteger a sus estudiantes”.
En los últimos días se ha retomado la noticia de que, en un intento de disminuir el acoso sexual, Japón ha decidido prohibir el uso de “colitas de caballo” al ser “demasiado provocadoras”.
Con esta medida se “evitaría que las alumnas exciten sexualmente a los alumnos y proviniendo posibles abusos”, obviamente levantando indignación entre activistas, calificándola de sexista, anticuada y retrograda para la expresión de sus alumnos. Recordemos que Japón utiliza estrictamente el Buraku Kōsoku, código de vestimenta instituido en 1870.
The Hindustan Times decidió investigar más al respecto, revelando que dicha noticia se encuentra en circulación desde 2020, y hasta el momento se desconoce el total de escuelas que adoptaron estas medidas (mayormente por el COVID-19), pero se estima que al menos 1 de cada 10 escuelas de Fukokahicieron oficial dicha prohibición.
Motoki Sugiyama, maestro de múltiples escuelas de Japón a lo largo de 11 años comentó que en efecto, la colas de caballo estaban prohibidas, pero esto no terminaba aquí, pues también se tenía un control estricto sobre el tipo y color de la ropa interior de sus estudiantes.
El código maneja otro tipo de reglas, como el largo de las faldas, el tipo de cejas, color de calcetines y mostrar pruebas fotografías del cabello natural de sus estudiantes para evitar que lo tiñeran.
Según Sugiyama, jamás se dio una respuesta lógica a dichas prohibiciones, pues aunque las colas de caballo y coletas son prohibidas para “evitar mostrar el cuello”, el pelo corto si está permitido, mismo que muestra más cuello en sus estudiantes.
VICE se puso en contacto con un vocero de la escuela Hosoyamada, al sur de la prefectura de Kagoshima, quien ha comentado que tras múltiples quejas, se ha permitido que las alumnas ya no usen ropa interior blanca, pues se ha permitido el uso del color gris, negro o azul. Las colas de caballo siguen prohibidas.