La diseñadora polaca Iga Weglinska creó una colección de «ropa emocional» que pone al descubierto el nivel de estrés y otras sensaciones de las personas que la usan.
A través de luces LED y sensores de temperatura corporal, nivel cardiaco y sudoración, en declaraciones al portal Dezeen, la polaca afirmó «La ropa emocional está hecha de prendas polisensoriales destinadas a expandir los límites de experimentar la ropa a través de experiencias basadas en la sustitución sensorial».
Cada vez que el color cambia de cálido a frío, significa que la persona está sudando o nerviosa por una situación y evidencia la necesidad de calmarse, por otra parte, las luces LED pueden similar el latido del corazón a través de unos sensores colocados en los dedos.
«Al interactuar con las prendas, la usuaria no solo puede estar informada sobre los cambios en su propio cuerpo, sino que eso nos puede ayudar a enfocarnos mejor en una relación íntima con la ropa, a controlar las reacciones corporales o incluso a establecer objetivos a lograr jugando con las reacciones de los materiales inteligentes, como cambios de color o de movimiento«, contó la diseñadora.