Tiempo aproximado de lectura: 6 minutos

Desarrolla:  Paranoid Productions    Distribuido: Fellow Traveller Diseñador: Richard Rouse III           Estreno: 02 de Agosto de 2019
Juégalo en: PS4, Xbox One, Switch, PC y MacOS

Género: Acción, Aventura, Estrategia
Jugadores: 1                      Clasificación: M (mayores de 18 años)

Tu sobrino se une a una secta que se muda al medio de la jungla y, luego de meses sin comunicación, su madre te pide ir a buscarlo ¿Estará realmente en peligro?

Si tendríamos que contar con los dedos la cantidad de videojuegos que han abordado la temática de las sectas o cultos, y limitándonos con los que lo hicieron bien sin dudas una sola mano sería más que suficiente para eso. The Church in The Darkness pertenece a ese número y a pesar de sus limitaciones, logra entregar una propuesta completamente diferente y prometedora a lo que estamos acostumbrados.

Paranoid Productions nos trae un título de acción de perspectiva aérea en el que la violencia y/o el sigilo son una opción, pero siempre conlleva consecuencias tangibles y hasta en la forma en que abordamos cada partida.

El pueblo misterioso de Freedom Town.
Difícil no perderse en medio de toda una civilización misteriosa.

Bienvenidos a Freedom Town

Cuando iniciamos un nuevo juego aprenderemos sobre la formación de la Misión de Justicia Colectiva, una secta creada por Isaac y Rebecca Walker, quienes luego de años de ser perseguidos por el gobierno estadounidense deciden fundar su propio pueblo en el medio de una jungla sudamericana. Estamos a mediados de la década del 70 y Freedom Town ya es un hecho, pero sus habitantes casi no tienen comunicación con el mundo exterior. Esto se vuelve un problema para sus familiares, pero en especial para nuestro protagonista: un ex agente de policía llamado Vic que debe infiltrarse en el asentamiento y averiguar el paradero de su sobrino Alex.

El contexto histórico resulta ideal para la construcción de la narrativa y su elección no fue casualidad. De hecho, Richard Rouse III, Director/escritor y diseñador del juego, admitió haber estudiado de cerca una gran cantidad de casos reales.

The Church in The Darkness es un juego distinto cada vez que lo iniciamos. No sólo porque el mapa este cambiado, que las edificaciones terminen en diferentes zonas o el equipamiento que tengamos a nuestra disposición a la hora de comenzar la partida. Las intenciones y la retórica de Isaac y Rebecca cambian junto con el resto de los aspectos morfológicos del mapeado, y eventualmente llegarán a afectar la forma en la que afrontamos la acción. En ese clima de absoluta incertidumbre deberemos infiltrarnos en Freedom Town, hallar a Alex y… Aunque, eso depende de lo que queramos hacer y con qué nos encontremos una vez dentro del asentamiento.

A las afueras de Freedom Town
«Freedom Town te da la bienvenida» así dice el cartel, pero el señor de la escopeta nos invita a dudar de tal «bienvenida»

Usa todo a tu disposición para sobrevivir

Es posible jugarlo como un título de acción, ya que, podemos ir matando a todo lo que se cruce en nuestro camino. Por eso en el juego contaremos con armas letales como pistolas, escopetas, rifles, y/o nuestras propias manos homicidas. También tenemos herramientas de sigilo y otras para generar distracciones. Unos ejemplos son como un reloj despertador programable, radios que se encuentran en algunas casas del asentamiento y piedras para distraer a los guardias por un momento. Y si no queremos matar a nadie habrá cloroformo y dardos tranquilizantes. Aun así, siempre deberemos borrar nuestros rastros, sabotear alarmas y esconder los cuerpos para evitar ser descubiertos. Paranoid Productions cuidó el aspecto jugable, que se presenta fluido, modesto, cómodo y bastante simple.

Cuidado con tus acciones en The Church in the Darkness

La decisión de cómo infiltrarnos quedará en nuestras manos, pero siempre lo ideal es conseguir información para actuar de la mejor manera. La más fácil siempre será asesinar por la espalda y esconder los cuerpos, pero con el correr de las partidas veremos que nada es blanco o negro.

Conoceremos a varios personajes que nos contarán cómo llegaron a la secta y por qué decidieron unirse. Nadie los obliga a sumarse, algunos pasaron de ser parias en la sociedad a un miembro respetado de esta nueva comunidad, algunos veteranos de guerra, otras víctimas de discriminación o simplemente jubilados que no pueden mantenerse debido al hostil sistema previsional.

La gran propuesta de este juego radica en estos cambios tan notorios y en cómo nos afectan como jugador, partida tras partida y casi sin que nos demos cuenta, en parte gracias a la mecánica de muerte permanente.

Tiene un buen balance entre tener que volver a empezar desde cero, los ítems que desbloqueamos al encontrarlos por primera vez. Además, por las misiones secundarias de los NPC, hacen que morir no se sienta una pérdida total de tiempo. Si llegamos a encontrar a Alex y cerramos la misión principal desbloquearemos un final. Hay más de dos docenas y cada uno depende de una mezcla de nuestras acciones y con la persona que nos hayamos encontrado.

Fundador Isaac Walker de Freedom Town
Uno de los fundadores tratando a los que quiere fuera. Nunca hacerlo enojar

Diferentes formas de terminar Church in the Darkness

En una partida encontré pruebas de rebeldía y documentos que hablaban de personas desaparecidas para luego entregárselas a un alguacil. Encontré a Alex, estaba por el otro extremo del mapa, estaba en contra de irse, pero lo convencí de irse, pero proponiéndome de hablar con Isaac y Rebecca. Los maté. Logramos escapar del asentamiento para después el gobierno clausuró el lugar y llevando a todos a sus hogares. En otra ocasión un aliado me delató, haciendo que todos del asentamiento me empezaran a buscar. Me atraparon donde Isaac y Rebecca me interrogaron hasta tener y me ejecutaron. Alex fue el único que escapó de allí.

Esos son sólo dos ejemplos de las muchas aventuras que puedes experimentar, con elementos al azar. Esto depende directamente de una opción que nos permite resetear todo el mapa, pero repitiendo la secta con la que acabamos de jugar.

Veredicto Final

The Church in The Darkness es un juego que se separa del resto de los juegos del año por su propuesta original en cuanto a la progresión y a su narrativa. Toca un tema sensible e interesante de la mejor manera, aunque lamentablemente no se profundizaron de una forma más dinámica. En el camino nos deja reflexionando sobre el uso de la cartelería, de mártires y propaganda. Hablando de lo bueno, y malo a la vez, es que lo cuentan a través de un juego sencillo, con mecánicas jugables básicas, aunque quizás se apoya demasiado en la interpretación del jugador para llevar el mensaje. A pesar de ser una obra muy barata, pero termina siendo increíble lo que han podido contar con tan pocos recursos. Eso sí, todo aquel que busque un juego de acción y sigilo dentro de una peligrosa secta en medio de la jungla, seguramente quedará decepcionado.