Por Alan Hernández La premisa Tras la incesante lucha por ver quién era más malo, la escena del Black Metal en Noruega se caracterizó por eventos no necesariamente admirables pero algunos sí impresionantes que tuvieron a sus protagonistas (Varg Vikernes y Øystein Aarseth «Euronymous»). Actualmente parece que esos sucesos no…
Por Alan Hernández
La premisa
Tras la incesante lucha por ver quién era más malo, la escena del Black Metal en Noruega se caracterizó por eventos no necesariamente admirables pero algunos sí impresionantes que tuvieron a sus protagonistas (Varg Vikernes y Øystein Aarseth «Euronymous»).
Actualmente parece que esos sucesos no han sido superados, pues se les sigue aclamando y se realizó una película. La producción está inspirada en el libro homónimo; Lords of Chaos está dando de qué hablar tanto entre sus protagonistas originales como entre el público seguidor del género.
La película dirigida por Jonas Åkerlund (quién alguna vez fue baterista en Bathory) se sitúa a finales de los 80 cuando Mayhem empezaba a aparecer en el mapa. Sin embargo, el eje principal de la película no es más que una lucha ególatra entre Euronymous y Varg, este último parece ser una víctima toda la película, el niño al que molestaron tanto que no aguantó y decidió matar al final.
Lo malo
El filme carece de conciencia cronológica, no deja al espectador comprender el orden de los hechos. Se muestra la legendaria tienda de Euronymous «Helvete» con su sello Deathlike Silence. El sello empezó en 1987 como Posercorpse Music, algunos afortunados tienen el EP «Deathcrush» limitado a 1000 copias y otros más afortunados tienen los demo, en 1988 pasó a tener el nombre anteriormente mencionado, el suicidio de Dead fue en 1991.
En el filme se suicida Dead, posteriormente se habla de la tienda y el sello ¿Entonces qué fue antes o qué fue después? Un momento fuerte de la película es el suicidio de Dead y es desaprovechado, una escena que va para candidata a formar parte de las peores muertes del cine.
Pasa de ser algo que algunos abordan con seriedad, a ser un humor ácido de mal gusto. Después de un corte vertical en cada brazo y un corte directo a la yugular parece una mala comedia escribir una carta, y aún así tener fuerza para apuntarte y volarte los sesos con una escopeta.
Lo rescatable
La cuestión de la quema de iglesias es quizá lo único bueno que tiene la película pero de igual manera mal aprovechada con encuadres muy malos y actuaciones aún peores.
Al final la muerte de Euronymous también parece tan sobreactuada que le da tiempo a Vikernes de prepararse y degustar un vaso de leche con chocolate. Un papel tan sonado como Fenriz de Darkthrone jamás figura en la película, parece innecesario e inclusive una estrategia de publicidad para la película.
Otro aspecto que genera urticaria son los aspectos políticos que refleja de manera aún más innecesaria, y es que ver la bandera comunista, un retrato de Salvador Allende en Helvete, una bandera nazi en casa de Varg, parece una tontería pensar que éstos verdaderamente en algún momento se llevaron, aparte que en el tiempo histórico en que se desarrolla, ambas ideologías ya estaban desechadas.
Un filme aburrido y con malas actuaciones. Si le sumamos la carencia de argumento y música se convierte en una película aún más tediosa. ¿Será que Åkerlund debería seguir haciendo los vídeos a Maddona?