En esta segunda entrega, Disney logra mantener la línea de sus películas tradicionales. Sin embargo, logra darle un giro innovador al adentrarnos en nuevas aventuras, cameos inesperados y dándonos mucho que reflexionar.
¿Qué podemos esperar?
La primera película de «Ralph El Demoledor» se estrenaba seis años atrás y aunque no fue aclamada por la crítica. Fue suficiente para darnos una segunda parte que evoca a la nostalgia de los juegos arcade.
En esta segunda parte vemos a los personajes de diversos videojuegos que marcaron nuestra infancia. Pero la vida se vuelve demasiado monótona para Vanellope quien ansía probar nuevas y desafiantes sensaciones.
Desarrollo de la historia:
Se puede decir que Vanellope es la verdadera protagonista de esta segunda entrega, ya que de ella dependerán las acciones que se desencadenan a lo largo de la historia. Finalmente Ralph y Vanellope salen de la rutina, pero a cuesta de poner en peligro Sugar Rush, juego del que ella proviene.
En un intento desesperado por volver todo a la normalidad, se embarcan en el internet. Dentro de este fascinante mundo podemos ver cientos de sitios web y aplicaciones que nos acompañan día a día.
De esta manera Ralph y Vanellope conocerán lo increíble que puede llegar a ser el navegar en línea, pero tristemente los llevarán a otras situaciones que no son tan agradables y que probablemente alguno de nosotros ha vivido.
¿Qué ofrece de nuevo?
Cabe destacar la película está llena de empoderamiento femenino, personajes nuevos como Shank (Gal Gadot) dan una fresca y rebelde sensación a la película. De igual manera las princesas logran ser reconceptualizadas, dejando de lado a las chicas delicadas y sensibles que vemos en las películas clásicas.
De igual manera si eres fan de Marvel, Star Wars, The Muppets y Pixar te llevarás una que otra sorpresa al momento de viajar a Oh My Disney. Al final la película te hará reflexionar sobre el autoestima, la confianza, las barreras mentales y la importancia de la amistad.
Como nota te recomendamos quedarte después de los créditos…